En el noveno párrafo de la Exposición de motivos de la Iniciativa de Ley se
enuncia:
Particularmente,
Nicaragua ha ratificado y suscrito la Convención sobre la eliminación de todas
las formas de discriminación contra la Mujer, misma que fue aprobada por la
Asamblea General de la ONU en 1979, la CEDAW -como hoy se le conoce por sus
siglas en inglés- ha alcanzado hoy la universalidad al ser la Convención más
ratificada en el mundo. Este instrumento Internacional es jurídicamente
vinculante, sus disposiciones son obligatorias y por lo tanto, el Estado
nicaragüense es responsable de que ésta tenga plena vigencia en nuestro país.[1]